Los últimos días no han sido sencillos para Alejandro Sanz, algo que él mismo se encargó de exteriorizar con unas preocupantes palabras por medio de su cuenta oficial de Twitter.
Allí, Alejandro Sanz explicaba cómo se sentía anímicamente y que muchas veces no tenía la fuerza y la energía suficientes para estar arriba del escenario y frente a un multitudinario público.
“No estoy bien. No sé si esto sirve de algo, pero quiero decirlo. Estoy triste y cansado. Por si alguien más cree que hay que ser siempre una brisa de mar o un fuego artificial en una noche de verano. Estoy trabajando para que se me pase”, expresó el cantante.
Luego, agregó: “Llegaré a los escenarios y algo dentro me dirá qué hacer. Pero a veces no quiero ni estar. Literalmente. Solo por ser sincero. Por no entrar al ruido inútil. Sé que hay gente que se siente así. Si te sirve, yo me siento igual”.
Si bien Alejandro Sanz no compartió mayores detalles en torno a cuáles podrían ser algunas de las causas por las que vive estas horas difíciles, fueron varios medios de comunicación los que remarcaron que el artista habría sufrido una estafa por parte de un amigo, por lo que ahora una millonaria deuda sería el principal de sus problemas.
A pesar de este delicado contexto, si hay algo que el intérprete español sabe es que siempre contará con el apoyo de sus fieles fans, quienes no dejaron de plasmar su gran cariño por él luego de que eligiese abrir su corazón para contar lo que le sucede.
En medio de todas estas muestras de afecto, fue en las últimas horas que Alejandro Sanz compartió una postal en sus historias de Instagram que plasmaba un detalle muy especial que recibió por parte de su público mexicano.
“Alejandro: un diluvio de flores no es suficiente para recordarte que estamos cerquita de ti; un océano no es nada cuando se trata de mandarte nuestro cariño y apoyo. Te queremos un chingo”, se leía en la carta que recibió Alejandro Sanz, donde se mencionan distintos clubes de fans locales, junto a una gran cantidad de flores. Por su parte, el músico incorporó tres emojis en forma de agradecimiento: uno con la bandera mexicana, uno de un corazón rojo, y otro de unas manos unidas en forma de plegaria.