La partida física de Andrés García no solo ha dejado un inmenso vacío en el ámbito del espectáculo televisivo, sino una serie de inconvenientes entre algunos integrantes de su familia, debido a todo lo que significa su herencia.
Se comenta que entre sus hijos y su esposa, Margarita Portillo, ha habido algo de molestias y uno que otro desacuerdo por todo lo que implica la división de estos bienes.
El conflicto principal se centra en un aspecto legal que no quedó resuelto totalmente cuando el artista televisivo estaba en vida y el cual involucra a las mujeres que fueron sus esposas, como Sandy Vela y Margarita Portillo, quien fue la última.
Según Roberto Palazuelos, quien era amigo de Andrés García fue quien habló sobre este tema durante una intervención que tuvo en el programa “De Primera Mano”. En el espacio televisivo explicó que hay un gran conflicto sobre la legalidad de sus matrimonios.
En principio, se sostuvo la idea de la que herencia del recordado actor pasaría a manos de su última esposa, Margarita Portillo pero tras descubrirse que su matrimonio no era legal,debido a que nunca se divorciaría de su primera esposa, Sandy Vela, se pone muy compleja toda la situación.
“Pero, ahorita con las indagaciones que se han hecho, nos enteramos que no hay ningún divorcio ni nada y que ese matrimonio, ante los ojos de la ley, sigue siendo el primero en derecho y el válido. El acta de matrimonio de Margarita Portillo es hasta que no la verifiquen después de un juicio. Ambas son válidas, la que prevalece y terminará ganando es la primera en derecho”,contó Palazuelos.
Fuente: (Imagen Entretenimiento)
El abogado también explicó que esta tema afecta de algún modo la compra y venta de las propiedades que tenía en vida Andrés García porque quien esté interesado debe contar con la aprobación y firma de todos los hijos y cónyuges que estén con vida y pusieron como ejemplo un rancho muy especial para el actor.
Ya las opiniones de los internautas se evidencian en el canal de YouTube de Imagen Entretenimiento y son muchos lo que celebran que Portillo se pueda ver imposibilitada de contar con la facultad de decidir qué hacer con los bienes del actor.