El picante puede ser el acompañante perfecto para las comidas, siempre y cuando seas tolerante a este tipo de sabores intensos, y es que claramente aporta un sazón especial que puede acentuar los sabores. Sin embargo, en exceso puede ser muy contraproducente para tu salud.
La sustancia responsable del sabor picante es la capsaicina, según explica "elconfidencial.com", la cual se encuentra en los chiles, pimientos y otras plantas de estas características. Ahora bien, dicha sustancia puede producir ciertos malestares que pueden arruinarte el día.
Síntomas
- Dolor de cabeza
- Náuseas y vómitos
- Dolor abdominal
- Diarrea
- Ardor de estómago
- Hemorroides
- Erupciones cutáneas
Esto se debe a que la capsaicina, presente en el picante, va a estimular los receptores de dolor en la boca y el estomago, lo que puede atraer estas sensaciones en pocos minutos.
En personas con diversos problemas de salud, sin duda, su consumo es algo que puede complicar su presente. Solo imagina lo que puede ocurrir con un familiar o amigo que sufra de úlceras, condición médica que empeorará una vez la capsaicina haga su efecto y pueda causar una mayor irritación.
Consejos a considerar
Ahora bien, no todo son malas noticias, ya que afortunadamente existen métodos confiables para el consumo de este tipo de condimento intenso para las comidas, y así no te expongas a estos síntomas.
Empieza con cantidades pequeñas y si encuentras una gran tolerancia y gusto, ve aumentando gradualmente la cantidad de picante que consumes. La idea es que encuentres tu límite por tu propia cuenta.
No está demás recordar que evites los picantes si tienes problemas de salud, como úlceras o reflujo gastroesofágico, como verás es una situación que puede complicar todavía más tu presente.
Por último, intenta combinar los alimentos picantes con otros alimentos que ayuden a reducir el ardor, como es el caso de la leche o el yogur. Con estos consejos podrás reducir de forma notable severos daños producidos por este tipo de alimento.