Las tendencias dentro de la nail art no se detienen. Y así, mientras que algunos diseños prácticamente quedan en el olvido y dejan de ser las más replicadas, otras se vuelven furor, y son de las más elegidas, ya sea para imitar desde la comodidad del hogar o en el salón.
Si bien en el universo de la nail art vimos cómo muchísimas personas se animaron a realizar sobre sus uñas algunos extravagantes y llamativos diseños de lo más “arriesgados”, con una longitud extra largas sobre las mismas, lo cierto es que en el último tiempo podemos destacar la predominancia de las uñas un poco más cortas, con diseños más de tipo “simples”.
Así, hemos visto que se volvieron tendencia las uñas “milky”, los tonos pasteles y la manicura francesa reversionada en otros colores. Pues bien, queremos hablarte de esta última manicura en particular, pero con una técnica específica que, al día de hoy es furor.
Hablamos de la “manicura americana”, una opción de nail art que, tal y como su nombre lo indica, se asemeja bastante a la manicura convencional, solo que en esta opción el tono blanco a utilizar es un poco más suave e incluso algo más “amarillo”, en combinación con un tono de base que se difumine con este tipo de blanco.
De esta manera, en lugar de quedar bien distinguido el comienzo del borde de las uñas con el resto de las mismas a través de un tono claro como el vía láctea y el blanco, los tonos mencionados previamente se entrecruzan en un diseño de uñas con efecto “ombré” e incluso degradado semejante a la uña natural.
Ahora que ya conoces todos los secretos detrás de la creación de esta nueva versión más “natural” del french style, es momento de replicar en tus uñas la nail art americana para brillar por todo lo alto.