La sal puede ser considerada como ese enemigo silencioso que más daño puede hacerte, al igual que el azúcar, y sí o sí debes aprender a combatir en la cocina. Es por ello que te presentaremos una serie de tips con los que puedes sustituirlo de forma apropiada, sin necesidad de sacrificar el sabor a tus recetas.
Es decir, hablamos de una forma correcta de evitar problemas cardiovasculares, retención de líquidos, problemas renales y demás consecuencias del consumo en exceso de este condimento, el cual hay que saber usar apropiadamente, así que atento a la siguiente información que te presentaremos a continuación.
Uso de hierbas
Una forma correcta de darle sabor a la comida sin necesidad de agregar sal es por medio del uso de hierbas frescas y secas, así como lo lees, por lo que es necesario mezclar este tipo de condimentos para darle vida a las recetas.
Por ejemplo, las hojas secas, como el orégano, o las frescas, como el cilantro, sin duda le suministrarán ese nivel de sabor que tanto buscabas, por lo que ahora deberías añadirlas en tus compras.
Condimentos
Aquí no hay ningún secreto. El uso de condimentos y especias como el comino, cúrcuma, curry o pimentón claramente es algo más que necesario en la cocina, especialmente si la idea es decirle adiós a la sal.
Prueba condimentando tu alimento por medio de estas especias y notarás cómo cambia su sabor de una forma mucho más saludable. Como dato opcional, nunca subestimes el poder del ajo.
Jugos cítricos
Otro clásico en la cocina. Los jugos refrescantes como el limón o naranja no solo son muy buenos para el consumo directo, sino también para sazonar cualquier receta que tengas en mente.
Es una manera mucho más sana para resaltar los sabores, especialmente si se trata de una receta en la que estas frutas puedan jugar un papel importante.
Ajo y cebolla
Tal cual como se indicó previamente, no subestimes el poder del ajo en la comida a la hora de convertirlo en el sustituto de la sal. Adicionalmente, agrega una cebolla y así tendrás dos alternativas naturales para comer libre de sal.
Podrías crear una salsa para darle sabor a la comida, con una pizca de aceite y vinagre. Luego, pasalo a la licuadora para tener a mano el gran secreto y que tus recetas tengan el mejor sabor.
Aquí lo tienes, varias alternativas para aprender a decirle adiós a la sal y su excesivo consumo. Más allá de dar un toque adicional de sabor, podría generar grandes problemas de salud a largo plazo.