Faltan muy pocos días para San Valentín, y esta fecha tan especial para los enamorados merece un look muy romántico, pero con un toque de modernidad. Es por eso que está de vuelta una tendencia que se volvió muy popular en los años 90, como lo fue el "Power Look" que se inspiró en famosas como Julia Roberts y Cindy Crawford, donde el maquillaje saca a relucir tu lado más femenino y empoderado.
Este toque de belleza se caracteriza por un aire de mucho romanticismo, pero haciendo énfasis en algunos detalles. Por ejemplo, en unas sombras de ojos que tienden a los colores azules o ahumados, y en donde los pómulos resaltan con el uso de coloretes en tonos rosados o mocha.
Este acondicionamiento facial, además, va acompañado de una piel aterciopelada que se logra con el uso de una base mate y de cobertura media, lo que da como resultado un acabado liso y sin brillo.
Este maquillaje también va acompañado de una mirada de impacto, donde las cejas juegan un papel muy importante. Deben tener volumen y longitud para una mirada muy atractiva. No se deben olvidar los labios, que deben verse jugosos y brillantes; se puede jugar con varias tonalidades, pero sin exagerar.
El cabello también juega un papel muy relevante para definir este maquillaje. La melena se debe llevar con volumen, incluso desde la raíz y, por lo general, se usa dejando la raya a un lado y sin darle mucha definición
Algunos ejemplos de este tipo de maquillaje, inspirados en esa tendencia de los 90, se reflejan en la película "Mujer bonita", que protagonizó la actriz Julia Roberts, así como en el estilismo de la modelo Cindy Crawford. Este look puede ser una muy buena iniciativa para lucir en la fecha de San Valentín y así recordar que el amor hacia otros también parte de consentirse y regalarse un poco de amor propio. ¿Y qué mejor manera que luciendo especialmente bella?