Los cactus se han convertido en una de las plantas más populares para tener en casa. Son resistentes, fáciles de cuidar y su variedad de formas y tamaños los hace perfectos para la decoración de interiores.
Más allá de su función ornamental, los cactus tienen propiedades que pueden mejorar la calidad del ambiente en el hogar. Estas plantas ayudan a purificar el aire eliminando toxinas y mejorando la frescura del entorno.
Además, se cree que neutralizan las ondas electromagnéticas que emiten los dispositivos electrónicos, lo que los convierte en una excelente opción para oficinas o espacios de trabajo, donde también promueven la concentración.
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Según el Feng Shui, las espinas de los cactus actúan como protectores, bloqueando las energías negativas y evitando que entren en el hogar. Sin embargo, hay que tener cuidado con su ubicación. Para que su energía sea beneficiosa, se recomienda colocarlos en exteriores, como terrazas o ventanas.
De esta manera, los cactus no solo añaden un toque natural y moderno a cualquier espacio, sino que contribuyen a mejorar la energía del hogar y requieren mínimos cuidados, lo que los convierte en una opción ideal para cualquier amante de las plantas.
Una de sus mayores ventajas es que requieren poca atención. Al ser originarios de zonas desérticas de América, están acostumbrados a sobrevivir en condiciones extremas. Esto significa que no requieren mucho riego.