La leche asada es uno de esos postres tradicionales que, con solo tres ingredientes principales, ha logrado ganarse un lugar en grandes cocinas. Si bien es similar al flan, esta receta se prepara de una manera muy sencilla.
Para hacer leche asada, se necesitan los siguientes ingredientes: un litro de leche, seis huevos, 180 gramos de azúcar y dos cucharadas de esencia de vainilla. Si se quiere dar un toque más tradicional, se puede agregar una ramita de canela. Además, para el caramelo, se utilizan 200 gramos de azúcar.
El proceso comienza con la preparación del caramelo. Se derrite el azúcar a fuego bajo en una sartén, sin remover al principio, hasta que tome un color dorado. Una vez listo, se distribuye el caramelo en una fuente rectangular, cubriendo las paredes, y se deja enfriar.
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Para el postre, si se desea aromatizar con canela, se calienta la leche con la ramita hasta que hierva. Luego, se retira del fuego y se deja reposar. Si no se utiliza canela, se baten los huevos en un recipiente, se agrega la leche fría, el azúcar y la esencia de vainilla, mezclando bien hasta que el azúcar se disuelva por completo.
El siguiente paso es colocar la fuente acaramelada dentro de otra más grande que pueda contener agua para hacer un baño María. Se vierte la mezcla de leche y huevos en la fuente acaramelada. Se hornea a fuego bajo durante aproximadamente una hora.
El resultado es una leche asada deliciosa con el caramelo fundiéndose en el postre. Se deja enfriar primero a temperatura ambiente y luego en la heladera por unas cuatro horas antes de servir.