Sin duda, tener nuestros cubiertos de cocina como recién comprados es bastante complicado, ya que hay muchos factores que hacen que se deterioren. El constante uso y el paso del tiempo generan que acumulen suciedad y que se torne muy compleja de quitar, pero por suerte existen trucos de limpieza muy efectivos.
En este artículo, te daremos un truco de limpieza muy fácil de implementar y sobre todo bastante económico, ya que los ingredientes para elaborarlo son muy sencillos de conseguir. Lo bueno de estos secretos de limpieza natural es que son verdaderamente increíbles, puesto que su resultado es mejor o igual a los que brindan los productos industriales.
La preparación de este truco de limpieza solo te llevará unos 15 minutos y tendrás cubiertos impolutos. Sin más preámbulos, te daremos el paso a paso para elaborar este remedio casero que hará magia en tus cubiertos de cocina sin tener que gastar grandes cantidades de dinero en productos específicos.
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¿Qué Necesitas?
- Papel de aluminio
- Bicarbonato de sodio
- Vinagre blanco
- Agua hirviendo
Pasos para dejar tus cubiertos como nuevos
Para comenzar a implementar este truco de limpieza, debes colocar una lámina de papel aluminio en un recipiente, teniendo en cuenta que la parte brillante esté hacia arriba. Acto seguido, pon los cubiertos sobre el papel aluminio, tratando de que no estén muy amontonados para que los ingredientes tengan un buen contacto con el metal.
Luego, espolvorea los cubiertos con bicarbonato de sodio, poniendo más cantidad en las zonas afectadas. Por último, vierte un cuarto de taza de vinagre blanco sobre los cubiertos, el cual hará una reacción química produciendo bastante espuma. Cuando la espuma se haya disipado, pon agua hirviendo sobre los cubiertos. Para finalizar, enjuaga muy bien los cubiertos y verás el increíble cambio.