Si quieres mejorar el equilibrio emocional, debes saber que las plantas tienen un gran poder para influir de manera positiva en tu estado de ánimo. Mantener tu jardín frondoso no solo ayudará a tener una casa estéticamente hermosa, sino también un ánimo optimista e incluso podría mejorar la calidad del sueño.
En esta ocasión, te revelaremos cuáles son las tres plantas que te ayudarán a mejora tu bienestar emocional, un aspecto muy significativo en los tiempos que corren. Las especies de las que estamos hablando son la sansevieria, conocida como lengua de tigre, el Aloe vera y la Monstera, o más conocida como costilla de Adán. A continuación, te detallaremos las cualidades de cada una de estas matas.
- Sansevieria: la calma en forma de planta
Estas plantas poseen unas bellas hojas que se distinguen por su largo y sus tonos en verde y amarillo. La sansevieria tiene la virtud de convertir cualquier ambiente en un sitio donde abunde la calma y la reparación. Otro aspecto que hace que esta especie sea muy popular es que puede purificar el aire eliminando las toxinas encerradas, transformando el ambiente en un espacio lleno de paz.
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- Aloe vera: el bienestar al alcance de la mano
Esta es una especie que posee múltiples benéficos medicinales y terapéuticos, por lo que es fundamental tenerla en tu jardín. El paisajista Fernando Pozuelo, en diálogo con el sitio web español WeLife, se refirió a las virtudes de esta planta. En este sentido, el experto señaló: “El inconsciente de las personas lo asocia con soluciones terapéuticas, dado que de sus hojas se pueden extraer muchos remedios. Se puede beber licuado, tomar su gelatina como si fuera mermelada, aplicarla directamente sobre la piel para regenerarla o refrescarla. Esa asociación hace que la consideremos una planta que genera bienestar”.
- Monstera: reducción del estrés garantizada
Esta planta es una opción excelente para las personas que hacen home office (trabajo desde casa), ya que ayuda a reducir el estrés de una forma increíble. En este contexto, Pozuelo señaló: “Se adapta muy bien a interiores más o menos luminosos sin radiación solar directa. Sus grandes hojas crean un ambiente exótico que reduce el estrés provocado por las pantallas, ordenadores, cables y dispositivos electrónicos”.