El óxido es uno de los mayores enemigos del hogar, una presencia que es capaz de arruinar por completo las ventanas y puertas, por ende, obliga a una cuantiosa inversión para hacer dichas reparaciones que podríamos evitar. Si estás más interesado en esto, entonces presta atención a los siguientes trucos de limpieza que te ayudarán y, así, cuidar tu bolsillo.
En el peor de los casos, simplemente vas a tener que cambiar por completo estas piezas y, de ahí, la importancia de la prevención, algo que puedes hacer ahora mismo y, de esa manera, evitarás dolores de cabeza a futuro. Para esto, solo necesitarás 3 ingredientes básicos en la cocina que son muy versátiles para esta labor.
Ingredientes como trucos de limpieza
Es importante aclarar que, antes de atacar al óxido como tal, hay que conocerlo con más profundidad y la mejor forma de hacerlo es a través de su definición: se trata de un compuesto químico formado por la combinación de oxígeno con otro elemento que, en este caso, puede ser un metal.
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Se caracteriza por su tono rojizo y se asocia a la corrosión de metales y, de ahí, la importancia de la prevención, justo lo que conocerás a continuación.
- Vinagre blanco
Empezamos con uno de los productos más comunes en el hogar, como lo es el vinagre, el cual es un agente ácido ideal para este tipo de trabajo. Basta con aplicar un poco, directamente sobre un trapo o cepillo, y limpiar directamente la superficie afectada.
- Bicarbonato de sodio
Otro clásico en los trucos de limpieza que no pueden faltar, ya que el bicarbonato es, de lejos, uno de los ingredientes más versátiles y este es el mejor ejemplo. Entre otras cosas, funciona para remover las partículas de óxido de los metales.
Debes mezclar un poco con agua o vinagre blanco, para luego aplicarlo directamente sobre el área afectada y dejarlo actuar por sí solo, para luego limpiar.
- Jugo de limón
Más allá de ser un jugo muy refrescante, el limón tiene agentes ácidos que ayudan a quitar el sarro y, en este caso, el óxido rápidamente. La clave para estos trucos de limpieza es la paciencia, pues una vez apliques un poco del jugo sobre el metal, debes esperar unos 10 minutos.
Pasado ese tiempo ya podrás tallar con un cepillo y observar los resultados a simple vista. Sin duda, todos estos ingredientes representarán un antes y un después en tu hogar.