Un visible error de acuñación hizo que una moneda de 1000 pesos de Sor Juana Inés de la Cruz despierte el interés de los coleccionistas que forman parte del mercado de la numismática. La pieza fue puesta a la venta en Mercado Libre por un valor de 35 mil pesos.
Mientras que algunos aficionados a la numismática discutirán si se trata de una pecunia de colección, lo cierto es que la moneda de 1000 pesos de Sor Juana Inés de la Cruz parece haber sido sometida a una falla durante el proceso de acuñación, lo que le da un toque distintivo sobre todas las de su época.
Numismática: ¿Cómo es la moneda de 1000 pesos de Sor Juana?
La moneda de 1000 pesos de Sor Juana Inés fue acuñada en 1988 y perteneciente a la familia A del Banco de México (Banxico). La pieza forma parte de una etapa en la que la unidad monetaria era diferente. En la actualidad, estas monedas están desmonetizadas, lo que aumenta su valor para la numismática.
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En su diseño original, la moneda de 1000 pesos de Sor Juana presenta en el anverso el Escudo Nacional en relieve escultórico y la leyenda “ESTADOS UNIDOS MEXICANOS”. El reverso, por su parte, está protagonizado por la efigie de Juana de Asbaje en tres cuartos de perfil, acompañada del símbolo “$”, el número “1000”, el año de acuñación, la inscripción “JUANA DE ASBAJE” y el símbolo de la Casa de Moneda de México “M°”. Un marco liso con gráfila en forma de puntos completa la composición.
La moneda de 1000 pesos de Sor Juana, según información suministrada por Banxico, tiene forma circular, un diámetro de 31.0 mm, un peso de 14.9 gramos y una composición bronce-aluminio. Además, cuenta con canto estriado.
Numismática: ¿Cómo es la moneda de 1000 pesos de Sor Juana con error?
Lo que diferencia a esta moneda de 1000 pesos de Sor Juana es un error de acuñación que ha llamado la atención de los coleccionistas. En las fotografías publicadas por el vendedor en Mercado Libre se aprecia que el diseño no se extiende por toda la circunferencia del círculo, dejando un espacio visible en el borde. Esta imperfección, lejos de disminuir su valor, la convierte en una pieza única y especial, codiciada por aquellos que buscan ejemplares en la numismática con características distintivas.