Alejandro Fernández presume de un buen momento a nivel profesional tras recuperar completamente las cuerdas vocales luego de un resfrío que derivó en una laringitis que preocupó a sus fanáticos. Este pasado fin de semana, el hijo de Vicente Fernández ofreció un concierto único, en el Domo Care, lleno de emoción, alegría y diversión.
Quien se encargó de abrir el show fue el hijo de “El Potrillo”, que cantó aproximadamente media hora y esto fue un enorme orgullo para su padre, pues el descendiente de “Chente” no pudo disimular la emoción al recordar que él abría los espectáculos del recordado Vicente Fernández. Padre e hijo interpretaron “Mujeres divinas” en homenaje al patriarca de la familia.
Alejandro es el fiel reflejo de Vicente Fernández y deja sin palabras a sus hijos
En este contexto, Alejandro concedió una entrevista a un medio de comunicación de Los Ángeles a través de una videollamada. El heredero de “El Charro de Huentitán” acaba de lanzar su nuevo material discográfico, “Te llevó en la sangre”, que ya conquistó a sus fanáticos gracias a la fusión de música ranchera y ritmos contemporáneos mezclados en 12 canciones.
Acerca del género regional, reflexionó con unas bonitas palabras que entusiasmaron a sus hijos, Camila y Álex, quienes siguen el legado familiar en el mundo de las melodías: “Gracias a Dios está en un muy buen momento la música mexicana, están saliendo talentos nuevos, impresionantes, y qué bueno, entre más se vaya abriendo la carpeta y el panorama, eso nos beneficia a todos”.
El heredero de Vicente Fernández está orgulloso de sus raíces y del gran avance que tiene el arte melódico mexicano en la actualidad: “No solamente se está haciendo en los países que normalmente se hacía, como México, Estados Unidos, Colombia y Centroamérica, sino en Europa, en todos lados, en todo el mundo se está escuchando la música mexicana”, concluyó.
Sobre qué hace en su tiempo libre, Alejandro desveló que elige pasarlo junto a sus tres nietas: Cayetana, hija de Camila; y Mía y Nirvana, hijos de Alex. “Me tienen vuelto loco. Las dos chiquitas están hermosas. Cayetana ya está empezando a hablar, todo el tiempo quiere hablar conmigo, me habla por face-time todo el tiempo. Mía es un poco más chiquita, pero ya está también tratando de hablar, según ella habla todo, pero no se le entiende nada. Nirvana está recién nacida, tiene siete meses más o menos. Cada vez que las tengo, las disfruto muchísimo, al máximo”.