Tal como indica Clinaca Clemente en su página web,"la piel está continuamente expuesta a factores que la dañan y deterioran como el sol, la contaminación, la mala alimentación, el tabaco, el alcohol, etc". En este sentido, los expertos en materia de salud y estética confirman que, para tener una piel sana y radiante, los buenos hábitos son indispensables.
El cuidado de la piel no solo se trata de una cuestión estética o de paliar la imagen de envejecimiento que aparece con el paso del tiempo, sino también de salud y bienestar dado que es uno de los órganos más extensos e importantes de nuestro cuerpo. El fin de seguir hábitos saludables y alejarnos de todo lo que nos provoca un deterioro prematuro es tener un buen plan de mantenimiento.
Entonces, ¿cuáles son las acciones que ponen en riesgo el cuidado de nuestra piel y favorecen el envejecimiento? Te contamos cinco de ellas que debes evitar.
Sedentarismo
Un estilo de vida saludable se aleja totalmente del concepto del sedentarismo y la mala nutrición. Para no caer en esto, es recomendable planificar de 30 a 60 minutos de ejercicios por día, levantarse cada hora unos minutos (de la silla, por ejemplo), etc. También es necesaria una correcta hidratación, un control regular con el médico y la gestión de una alimentación balanceada.
Dormir boca abajo
Según el Instituto del Sueño de Madrid, son muchas las investigaciones que vinculan el descanso con la piel. Determinan que el buen dormir es uno de los mejores tratamientos de belleza. En este sentido, los expertos recomiendan dormir boca arriba, debido a que es la mejor postura para evitar las arrugas. De esta manera, aseguran, no existe presión contra el órgano lo que permite respirar y la buena circulación de las células,.
Exceso de exfoliación
Roxette Ramírez específicó en su artículo publicado en panoramaweb.com.mx que “la exfoliación regular es importante para eliminar las células muertas de la piel y promover la renovación celular, pero el exceso de exfoliación puede causar irritación e incluso causarle un grave daño a la barrera de la piel. No excedas la exfoliación a una o dos veces por semana con productos suaves y no abrasivos”.
No usar lentes de sol ni protección solar
La exposición al sol sin estas dos protecciones puede generar un deterioro irreversible en nuestra piel. Estos son algunos de los efectos:
- Daño en la superficie cutánea.
- Pérdida de colágeno.
- Aparición de arrugas y manchas.
- Envejecimiento prematuro.
- Puedes desarrollar enfermedades y condiciones como cáncer, etc.