Una de las plantas más comunes puede transformarse en un pesticida natural y en un gran aliado para la salud. Debido a sus propiedades antibacterianas, antisépticas y su alto contenido en nitrógeno, la ortiga es una herramienta invaluable para cuidar tanto a tus plantas como a tu organismo. Solo será necesario el reciclaje de un puñado de hojas secas para preparar un pesticida casero.
¿Cómo preparar un pesticida con ortigas?
Para preparar un pesticida natural a base de ortiga, solo necesitas un litro de agua y 20 gramos de ortiga seca o 100 gramos de ortiga fresca. Corta la planta desde el tallo, pícala y macérala con un palo en un recipiente con agua.
Luego debes mezclar bien toda la preparación de este reciclaje de hojas secas y dejar reposar durante dos semanas en invierno o diez días en verano, removiendo el preparado diariamente para favorecer la fermentación.
Una vez que la mezcla producto del reciclaje de hojas secas deje de burbujear, estará lista para usar. Colar y guardar en un frasco hermético. Aplicar en las hojas de tus plantas por la mañana, asegurándote de cubrirlas por completo.
Beneficios para la salud que ofrece la ortiga
Más allá de su uso como pesticida, la ortiga también ofrece beneficios para la salud. Aunque siempre será recomendable una consulta con tu médico, es importante destacar que las propiedades antiinflamatorias, diuréticas y astringentes de la ortiga la convierten en un aliado natural para tratar diversas afecciones.
- Artritis: Los baños de ortiga pueden aliviar el dolor y la inflamación de las articulaciones.
- Hemorroides: Las compresas de infusión de ortiga reducen la hinchazón y el picor.
- Inflamaciones internas: La ingesta de ortiga en infusión o en cápsulas ayuda a combatir la inflamación generalizada.
- Diarrea: La ortiga posee propiedades astringentes que ayudan a controlar la diarrea.
- Trastornos menstruales: La ortiga regula el ciclo menstrual y alivia los síntomas del síndrome premenstrual.
- Inflamación de la próstata: La ortiga mejora la salud de la próstata y reduce los síntomas de la hiperplasia benigna de próstata (HBP).