Viernes 26 de Abril 2024
PLANTAS

El encanto del incienso: conoce los misterios y usos de esta planta aromática

Descubre todos sus secretos

Plantas. Fuente: (Instagram)
Escrito en ESPECTÁCULOS el

Si de plantas aromáticas hablamos, el incienso es de las más particulares y bellas. Esta planta verde brillante y hermosa tiene sus consejos secretos para crecer adecuadamente, y aquí te los mostraremos todos.

La planta Plectranthus coleoides, mejor conocida como incienso o falso incienso, no tiene cuidados extenuantes, sin embargo, es muy selectiva y estricta con la luz que recibe, por lo que pondremos el foco primeramente en este punto tan especial. ¡Comencemos!.

¿Cómo cuidar la planta de incienso?

Iluminación: el punto clave

Esta frágil planta prefiere los climas cálidos que van desde los 10 a los 20ºC, pero además, también tolera muy bien las temperaturas mayores a este parámetro, aunque no sucede lo mismo con los climas gélidos.

Otro punto importante es que la luz tiene que ser abundante. Esta deberá ser obligatoriamente indirecta, puesto que los rayos solares directos podrían quemarla.

Tierra 

El sustrato del incienso tendrá que ser preferentemente abundante en componentes orgánicos para que sea aireado y de un drenaje óptimo. Un buen consejo si tienes el incienso como planta de interior será abonarla cada 15 días en primavera.

Riego

Siguiendo con el riego, la planta aromática de incienso se debe regar únicamente en las temporadas cálidas, donde su actividad es más alta, aunque debemos poner atención sobre su tierra, la cual deberá estar ligeramente húmeda. 
Presta vital atención a la prevención de los encharcamientos, pues esto podría matarla o dejarla sumamente debilitada.

Reproducción

Lo económico de esta planta reside en su facilidad para reproducirse. Este proceso se realiza fácilmente por división de mata o esquejes en primavera.

Plagas

Los climas cálidos del verano invitan a las plagas de pulgones y los del invierno a los hongos. Es por esto mismo que debemos cuidarla muy bien de los encharcamientos, pues no solo traen seres indeseados, sino que también provocan la pudrición de las raíces y la pérdida de sus hojas.