Para nadie es un secreto que la lavanda es una de las plantas preferidas por los expertos en la jardinería, puesto que transforma de manera natural cualquier ambiente, atrae mariposas, aromatiza cualquier zona y, lo que es mejor aún, ahuyenta las plagas.
Asimismo, el Feng Shui señala que este tipo de arbustos atrae la buena suerte, por lo que muchos deciden no solo tenerla en los jardines, sino también usarla en el interior de la casa como aromatizador natural o preparar bebidas calientes que alivian el sueño.
En caso de que quieras disfrutar de los múltiples beneficios de dichas plantas, reprodúcela de forma rápida con agua y mediante un proceso sencillo.
región mediterránea. Fuente: (Instagram).
Cómo reproducir la lavanda con agua
- Busca materiales de jardinería, como tijeras y guantes.
- Desinfecta las herramientas a usar con alcohol para que los esquejes de la planta no se infecten.
- Revisa la lavanda que tengas en casa y selecciona las ramas más leñosas con ramas secundarias.
- Corta las ramas de forma diagonal.
- Ten en cuenta que las ramas deben medir 20 centímetros de largo, aproximadamente.
- Limpia todo el tallo hasta que se quede sin ramas o brotes.
- Coloca un el tallo en un recipiente con agua. En este punto, el agua debe cubrir el tallo hasta la mitad.
- Deja que los espejes de la lavanda estén inmersos en el agua por unas 4 o 6 semanas.
- Cuando transcurra el tiempo, siembra los esquejes en una maceta.
- Usa sustrato natural, rico en vitaminas y nutrientes.
- Humedece la tierra de la lavanda constantemente hasta que, finalmente, tenga sus primeros brotes y puedas llevarla al sol.
Tras haber realizado el paso a paso indicado, obtendrás como resultado la planta deseada, que empezará a reproducirse de forma orgánica por todo el jardín si así lo deseas.
Beneficios de la lavanda para la salud
De acuerdo con los conocedores en la materia, la lavanda es una de las tantas plantas que aportan beneficios importantes en la salud del ser humano.
En ese sentido, los expertos en el área señalan que estas plantas reducen el nivel de estrés y la ansiedad. Además, favorecen la calidad del sueño y la digestión.
No obstante, ayudan con la curación de las heridas en la piel, promueve el crecimiento del cabello y tiene efectos antiinflamatorios y antimicrobianos.
Por todo lo antes subrayado, la lavanda se convirtió en una de las plantas favoritas en el mundo de la jardinería y la decoración de interiores en general.