Las pastas son una opción reconfortante y nutritiva de las que existen miles de recetas para disfrutarlas de todas las formas que te imagines.
Lo mejor de esta comida es que no solo se limita a los climas fríos, sino que también puedes comerlas frías gracias a las deliciosas recetas de ensaladas con pasta.
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Si necesitas inspiración para la cocina, déjanos mostrarte algunas recetas tan exquisitas como sencillas para cocinar tus pastas sin morir en el intento.
Raviolis caseros con espinacas
Ingredientes
- 300g de harina
- 3 huevos
- 1 calabacín
- 200g de espinacas
- Aceite de oliva virgen extra
- Queso Parmesano rallado
- Sal
Preparación
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En un recipiente grande, forma un volcán con la harina y coloca los huevos en el centro.Agrega una pizca de sal y comienza a integrar los huevos con la harina, mezclando gradualmente hasta obtener una masa homogénea.Amasa la masa durante unos 10 minutos o hasta que esté suave y elástica. Si está demasiado seca, puedes agregar unas gotas de agua.
Lava bien las espinacas, escúrrelas y picalas bien fino las espinacas, repite el proceso con el calabacin y córtalo en cubos pequeños.
En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio. Agrega los cubos de calabacín y saltea durante unos 5 minutos o hasta que estén tiernos.Añade las espinacas picadas a la sartén y saltea durante unos minutos más hasta que se marchiten. Condimenta con sal al gusto. Retira del fuego y deja enfriar.
Coloca pequeñas porciones del relleno de espinacas sobre una de las láminas de masa, dejando un espacio entre cada porción.Cubre con la otra lámina de masa y presiona suavemente alrededor de cada porción de relleno para sellar.Con un cortador de raviolis o un vaso, corta los raviolis y presiona los bordes con un tenedor para sellarlos completamente.
Hierve agua en una olla grande con sal y un chorrito de aceite de oliva.Cocina los raviolis en lotes en el agua hirviendo durante 3-4 minutos o hasta que estén al dente y floten en la superficie. Sirve los raviolis calientes, espolvoreados con queso Parmesano rallado y unas hojas de espinaca.
Pasta con panceta, trufa y parmesano
Ingredientes
- 300 gr pasta fresca
- 50 gr panceta curada con pimienta
- 150 gr leche
- 150 gr nata 35%mg
- 30 gr parmesano rallado
- 10 gr trufa fresca
- 20 gr pasta de trufa melanosporum
Preparación
Corta en láminas bien finas la panceta y cocínala al fuego para que comience a caramelizarse. Agrega la leche, la nata y la pasta de trufa, deja cocinar por 3 minutos.
Agrega el parmesano y deja reducir en su hervor, la textura deberá ser semilíquida, así que no lo dejes por mucho tiempo.Retira y sirve bien caliente y con trufa melanosporum rallada por encima.
Raviolis rellenos de requesón y salvia
Ingredientes
Para la pasta:
- 200 g de harina
- 50 ml de agua
Para el relleno:
- 150 g de requesón
- nuez moscada
- 2 hojas de salvia (y algunas para decorar)
- 20 g de queso parmesano rallado
- aceite
- sal
Preparación
Coloca la harina en un recipiente grande y forma un volcán en el centro. Agrega el agua poco a poco mientras mezclas con la harina hasta formar una masa homogénea. Amasa la masa durante unos 10 minutos hasta que esté suave y elástica. Envuélvela en film transparente y déjala reposar en el refrigerador durante al menos 1 hora.
En un bowl, mezcla el requesón con el queso parmesano rallado. Ralla un poco de nuez moscada sobre la mezcla de requesón y queso. Pica finamente las hojas de salvia y agrégalas a la mezcla de requesón. Condimenta con sal al gusto y mezcla bien todos los ingredientes hasta obtener una mezcla uniforme.
Divide la masa en dos partes iguales y estira cada parte con un rodillo hasta obtener una lámina fina. Coloca pequeñas porciones del relleno de requesón y salvia sobre una de las láminas de masa, dejando un espacio entre cada porción.
Cubre con la otra lámina de masa y presiona suavemente alrededor de cada porción de relleno para sellar. Con un cortador de raviolis o un vaso, corta los raviolis y presiona los bordes con un tenedor para sellarlos completamente.
Hierve agua en una olla grande con sal y un chorrito de aceite de oliva. Cocina los raviolis en lotes en el agua hirviendo durante unos 3-4 minutos o hasta que estén al dente y floten en la superficie. Retira los raviolis cocidos con una espumadera y colócalos en un plato.
Emplata los raviolis calientes, espolvoreados con un poco de aceite de oliva, queso parmesano rallado y hojas de salvia fresca como decoración.