En el mundo del coleccionismo, algunas monedas mexicanas tienen un valor mucho más significativo de lo que podríamos imaginar. La numismática, que estudia las particularidades y rarezas de objetos de valor, permite descubrir características únicas que, al ser reconocidas, pueden elevar considerablemente el valor de estas piezas en el mercado.
En la actualidad, numerosos coleccionistas se encuentran en la búsqueda de billetes que presenten errores de impresión, estén fuera de circulación o tengan alguna singularidad que los haga únicos.
Un ejemplo destacado es una moneda de 20 pesos que actualmente se está comercializando en línea por un valor cercano al medio millón de pesos. Esta moneda ostenta un estatus distinguido al formar parte de una edición conmemorativa realizada durante el cambio de siglo.
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Los expertos en numismática han identificado características particulares en este ejemplar. Con un diámetro de 32 milímetros y un peso de 15.945 gramos, presenta un canto estriado, pero discontinuo.
Su composición bimetálica incluye una parte central y otra perimétrica, compuestas de cobre, níquel y aluminio. En plataformas de compra y venta en línea, el precio actual de esta moneda ronda el medio millón de pesos.
Forma parte de una colección compuesta por cuatro piezas, creada a principios del milenio por el Banco de México. Esta particular moneda rinde homenaje a Octavio Paz, un personaje extraordinario que recibió el Premio Nobel de Literatura y el Premio Cervantes.