Muchas veces, sin querer notamos que algunas de nuestras prendas predilectas adquirieron algunas manchas indeseadas, razón por la que es importante encontrar una solución rápida para ello, para evitar así que queden allí de forma permanente.
Aunque si bien depende mucho de qué tipo de mancha se trata, y así también el material que compone la prenda en cuestión, esta vez haremos un especial hincapié en las manchas de pintura.
Esta clase de manchas suelen ser de lo más comunes, sobre todo en los niños mientras realizan sus actividades escolares, o así también entre los adultos al momento de, por ejemplo, pintar el hogar o durante alguna actividad artística o hobbie, entre algunas de las tantas posibilidades.
En primer lugar, debes tener en cuenta de qué tipo de manchas de pintura se trata. Si es de látex, y ya está seca, lo que debes hacer inicialmente es lavar la prenda de revés con agua tibia. Si aún no se secó, lavala de forma inmediata, dado que con seguridad saldrá de forma sencilla.
Por otra parte, si el tipo de mancha es de acrílico, debes utilizar jabón para lavar los platos y agua tibia y cepillar la zona con ambos ingredientes. Poco después, notarás que la mancha comienza a desvanecerse. Esta se irá por completo gracias al posterior lavado del modo en el que lo haces habitualmente.
Finalmente, si se trata de manchas más difíciles de remover, como es por ejemplo el caso de la de pintura al aceite, debes tener en cuenta primero si esta se secó o no. En caso de que sí, debes suavizarla con algún producto recomendado por la marca de pintura en cuestión.
En caso de que no se haya secado, procede a colocar boca abajo la mancha sobre una toalla blanca, y limpia con el disolvente y aplástala de modo que el paño utilizado quede húmedo. ¡Y listo! Con el lavado habitual y siguiendo estos pasos, te olvidarás de las manchas de pintura en la ropa.