Existen una gran variedad de frutas y verduras que son indispensables en nuestra alimentación diaria. Entre las múltiples opciones posibles, en el día de hoy queremos hacer alusión al limón.
El limón se caracteriza por brindar un toque extra de sabor a muchas de nuestras comidas, sin importar si se trata de un platillo dulce o salado. Desde condimentar platos salados y hasta la elaboración de un budín o torta, si hay algo que caracteriza al limón es su versatilidad. En esta ocasión, queremos poner el foco en la planta que nos brinda el limón, es decir, el limonero.
La planta en cuestión, y al igual que cualquier otra, requiere de ciertos cuidados que garanticen no solo su correcto crecimiento, sino que nos brinde los mejores limones naturales posibles.
Si lo que deseas es plantar un limonero en tu casa y que este crezca adecuadamente, existe un gran secreto vinculado con este que debes conocer. Este tip fue compartido desde el sitio “El Heraldo de México”.
Lo que necesitarás para que esta planta se vea grandiosa en todo momento es: una planta de lechuga morada o verde sin deshojar (chica o mediana), jabón líquido, un limón con las ramas del sitio en el que fue cortado, y un poco de cerveza, que puede ser de color oscura o clara.
El primer paso consiste en tomar una maceta para colocarle tierra y la planta de lechuga. Como paso previo debes realizar un hueco en el tallo de la lechuga, en el cual debe entrar el tallo del limón que sembraremos.
A continuación, debes colocar la planta de lechuga en la tierra de la maceta, pero sin que esta se cubra por completo, dado que es momento de añadir una cucharada de jabón líquido en el hueco que realizamos previamente, y luego de ello añadiremos media lata de cerveza. Si se derrama, el resultado será igualmente favorecedor, dado que esta bebida funcionará como fertilizante.
El siguiente paso para obtener un fantástico limonero será colocar el limón junto con el tallo y las hojas. Solo debe quedar por fuera el limón. Añade más tierra, pero sin cubrir el limón, y cubre la maceta con una bolsa plástica. Es importante que la tierra esté húmeda dado que no será posible añadirle agua mientras la planta esté cubierta con la bolsa. En unos pocos meses comenzarás a apreciar el crecimiento de ramas y más frutos.