De acuerdo a los gustos y preferencias de cada persona, son diversos los platillos que pueden degustarse, por ejemplo, en el desayuno o la merienda. Muchas personas prefieren, para la primera comida del día, una opción salada por sobre una dulce.
En este sentido, si te encuentras a la búsqueda de una receta que no solo sea fácil de preparar sino también deliciosa y del agrado de la mayoría, puedes elegir unos exquisitos huevos benedictinos con salsa holandesa para compartir en el desayuno.
A continuación, te enseñamos todos los detalles de esta preparación, con un paso a paso que fue compartido desde el sitio “Mejor con Salud”, y que requiere de pocos ingredientes.
¿Qué necesitas para llevar a cabo esta receta? Para la salsa holandesa: sal y pimienta al gusto; 3 yemas de huevos; 1 cucharada de zumo de limón y 200 gramos de mantequilla derretida y clarificada (tibia al momento de usarla).
Por otra parte, para los huevos pochados, este platillo requiere de: 3 huevos frescos; 3 tazas de agua; ½ cucharada de vinagre y 1 cucharada de sal. Finalmente, para emplatar, necesitarás: un pan o muffin inglés; sal y pimienta al gusto; tocino, jamón o salmón ahumado al gusto (omite estos ingredientes si prefieres la versión vegetariana); y 1 ramita de ciboulette finamente cortada.
El primer paso de esta receta consiste en elaborar la salsa holandesa. Para ello, coloca las yemas en un tazón de acero inoxidable y bátelas. Caliéntalas a baño maría, a no más de 65°C. Añade el zumo de limón, sal y pimienta al gusto. A continuación, incorpora en forma de hilo la mantequilla tibia. Continúa batiendo hasta que su consistencia sea la de una salsa. Retira y reserva.
El siguiente paso consiste en preparar los huevos. A fuego medio, calienta las tres tazas de agua en un cazo junto a la sal y el vinagre. Abre los huevos y sepáralos en distintos platos, evitando así que la yema se rompa.
Una vez que el agua alcanzó el punto de ebullición, con una cuchara revuélvela en una misma dirección hasta que forme un remolino. Añade rápidamente el huevo en el remolino y deja que se cocine por 3 minutos. Luego, saca el huevo con un escurridor y colócalo en un papel de cocina para eliminar el exceso de agua.
Finalmente, el último paso de esta receta es su presentación. Si así lo deseas, elabora tu carne favorita. A continuación, corta a la mitad un pan o muffin y dora los dos lados de cada mitad. Una vez listo, coloca la carne y por encima el huevo, y, como paso final, la salsa holandesa condimentada con sal y pimienta, y decorada con el ciboulette cortado en pequeños trocitos.