Son cuantiosos los alimentos que añaden, sin duda alguna, un toque extra y especial de sabor a todas nuestras comidas. Con mayor o menor intensidad, un platillo puede cambiar por completo gracias a varios de ellos.
Sin embargo, muchas veces decidimos adquirirlos, pero no para consumirlos en el momento o poco después, sino varios días o semanas más tarde. Ante este panorama, es fundamental saber perfectamente cómo conservar alimentos de este estilo en nuestros refrigerados para que, por un lado, no se echen a perder y, además, tampoco dejen de brindar a nuestras comidas su grandioso sabor original.
Este es el caso de alimentos como la cebolla, los pimientos y los tomates, los cuales pueden deteriorarse con gran facilidad (ya sea que estos estén enteros o en porciones), si no se realizan determinados procedimientos para que estos permanezcan intactos.
Al momento de conservar alimentos, lo importante es tener en cuenta el tiempo que cada uno de estos pueden permanecer intactos, a pesar de que no los vayamos a ingerir en el momento. En el caso de los pimientos, por lo general, su duración se extiende entre una y dos semanas.
Por otra parte, para conservar las cebollas, estas deben colocarse en un sitio fresco, seco y oscuro, como, por ejemplo, la despensa. Evita colocarlas en el refrigerador.
Finalmente, en lo que a conservar alimentos respecta, nos resta mencionar a los tomates. Si su consumo acontecerá pronto, lo que podemos hacer es guardarlos a temperatura ambiente, lejos de la luz solar y también de otras frutas.
Respecto a conservar alimentos, pero, sobre todo, los tres mencionados, por medio de su congelamiento, debemos decir que todos ellos pueden permanecer hasta por 12 meses en el congelador.
Los pimientos, en primer lugar, deben almacenarse en el congelador una vez que los hayas lavado, secado, quitado sus semillas y cortados en trozos. Los debes colocar allí en una bandeja y, unas horas más tarde, cuando ya se han congelado, deberás traspasarlos a una bolsa, donde puedes conservarlos hasta el tiempo mencionado previamente. Este proceso lo repetirás para conservar alimentos ya mencionados, como el tomate y las cebollas.